Tras dos años de pandemia, el mundo ha cambiado y nosotros, como profesionales del turismo, tenemos que ajustarnos a las necesidades de los viajeros. Antonio Taverna, Presidente de Expo Mayoristas, nos cuenta cómo podemos influir como agentes de viajes.
Actualmente estamos viendo muchísimas decisiones de compra de viajes de último minuto. Esta tendencia posiblemente cambie cuando volvamos a “la normalidad” a la que estábamos acostumbrados y cuando los pasajeros vean que la incertidumbre hacia el futuro va siendo cada vez menor –especialmente en lo que se refiere a los requisitos sanitarios-.
Lo anterior es normal, pues hay que entender que los pasajeros invierten mucho en su viaje y nadie quiere sentir que su dinero está en riesgo.

Ahora bien, hay algo que nosotros los agentes de viajes podemos hacer para influir sobre esta decisión de compra.
Primero, como industria hemos aprendido de la pandemia, y hablando en términos operativos, estamos mejor preparados hoy en día para enfrentar una eventualidad, como ocurre con la tramitación de reembolsos, que es mucho más fácil que hace dos años.
Segundo, es importante aconsejarle al cliente contar con un seguro de asistencia con cobertura COVID e incluir el seguro de cancelación, estudiando muy bien la póliza para ver en qué casos y cómo tramitar un eventual reembolso. Recuerda que Terrawind Global Protection y Universal Assistance siguen siendo, sin duda, las mejores opciones del mercado.

Tercero, dile a tu pasajero que no tiene que pagar todo ya, ya que las salidas regulares de los circuitos de los operadores que manejamos los socios de Expo Mayoristas, operarán prácticamente sin cancelaciones, por lo que es posible pagar el aéreo y dejar un depósito para el terrestre. Dejando hasta el final la liquidación del viaje, el pasajero sentirá menos riesgo.
Cuarto, hay que considerar que en los destinos turísticos todavía hay –y seguirá habiendo-muchas visitas, especialmente en aquellos espacios cerrados. Los aforos son limitados, por lo que más vale tener apartados los lugares desde ahora y así, no arriesgar a que el pasajero no pueda visitar un museo, una atracción o un restaurante imperdible.